Si tienes una cuenta de Netflix y pasas los fines de semana “maratoneando” algunas series de esta plataforma, seguramente te has cruzado con el título Tidying Up with Marie Kondo.
Esta serie presenta casas de familias estadounidenses que necesitan ayuda para organizar y ordenar sus hogares. Marie Kondo, experta japonesa en limpieza, es la encargada de este orden, a través de su método de organización bautizado como KonMari.
¿Cuál es la base de su método? Pues consiste en revisar cada cosa que poseas y acumules, una por una, y decidir si ese elemento te “genera alegría”. Si es así, lo guardas. Si no, agradeces y luego lo botas.
¿Cómo relacionamos esto con nuestro hogar y nuestras ventanas?
Sucede que, así como muchas personas poseen artículos que ya no les son útiles, también hay muchos propietarios que viven con ventanas viejas o ineficientes en sus hogares.
Ya sea porque se han deteriorado, y no cierran o abren fácilmente, las ventanas deterioradas no ayudan a que la energía de tu casa sea eficiente. Piénsalo: esas ventanas probablemente no provoquen alegría.
Seguramente ya tienes otros planes para tu casa o departamento antes que pensar en renovar tus ventanas. Tal vez planeas renovar tu cocina, o modificar alguna de las habitaciones o tu sala de estar. Si es así, debes evaluar si alguna de estas modificaciones es verdaderamente importante como para afectar la habitabilidad de tu casa.
Pero también es importante considerar renovar tus ventanas, y cambiarlas por unas ventanas inteligentes. Pues se sabe que, entre otros beneficios, al reemplazar tus ventanas antiguas por unas nuevas, las personas desearán quedarse más tiempo dentro de casa, disfrutando de sus días en familia o con sus amistades en su hogar.
Permítete este cambio y descubrirás una nueva experiencia en tu vida hogareña. Si bien muchas personas inicialmente deciden cambiar sus viejas ventanas por unas ventanas de PVC o ventanas antiruido, que sean más funcionales o eficientes energéticamente, no son pocas las veces que se sorprenden gratamente de cómo sus nuevas ventanas también cambiaron el “feeling” de su hogar. En efecto, sienten su casa más tranquila, más cómoda, incluso más acogedora. De hecho, de haberlo sabido antes, seguramente hubieran optado por unas ventanas aislantes hace mucho tiempo.
Eso sí: reemplazar una ventana no es tarea tuya. Seguramente escucharás o leerás que es muy fácil de hacer, pero lo recomendable es que esto lo dejes en manos de un profesional.
Confía en un especialista al momento de la elección e instalación de tu ventana hermética, ya que el rendimiento de una ventana depende de hacerlo de manera correcta. De lo contrario su funcionalidad y efectividad no son garantizadas.
Estaremos encantados de darte asistencia con tus planes. Visítanos en Calle Luis Tezza 173, oficina 102, Urb. Polo Hunt, o llámanos al (01) 628-0058
